IDOLOS
La Biblia habla constantemente en contra de la idolatría. Cualquier cosa que es un objeto de adoración, * oración, o al cual se le tenga fe, en lugar que a Dios, es un ídolo. “No te harás imagen, ni ninguna semejanza de lo que esté arriba en el cielo, ni abajo en la tierra, ni en las aguas debajo de la tierra. No te inclinarás a ellas, ni las honrarás; porque yo soy Jehová tu Dios, fuerte, celoso, que visito la maldad de los padres sobre los hijos hasta la tercera y cuarta generación de los que me aborrecen…” (Es el segundo mandamiento, Éxodo 20:4-5) Algunas iglesias tienen estatuas (ídolos) en cada esquina pero si las personas se inclinan, queman incienso, oran a ellos eso es idolatría. Dios es “celoso” cuando tenemos algún sustituto que toma su lugar. “¿Y qué acuerdo hay entre el templo de Dios y los ídolos? Porque vosotros sois el templo del Dios viviente…” (2 Corintios 6:16) “Siendo, pues, linaje de Dios, no debemos pensar que la Divinidad sea semejante a oro, o plata, o piedra, escultura de arte y de imaginación de hombres.” (Hechos 17:29)
La Biblia dice: “Dios es Espíritu; y los que le adoran, en espíritu y en verdad es necesario que adoren.” (Juan 4:24) Dios es el que decide como debe ser llevada ante el nuestra adoración y él dice que necesitamos (“debemos adorarle”) solamente de dos manera, “en espíritu” (no con cosas) y en “verdad” (la Biblia). Otras cosas como un piano o incluso el edificio de la iglesia son lindas, pero no es lo que requiere Dios, la iglesia primitiva no tenía ninguna de estas cosas. Pero hoy es posible “apropiarse” de una religió si ésta tiene ídolos u otras “cosas” de las cuales la Biblia habla en contra o no las menciona. Nuestra adoración a Dios no debe estar ligada a las cosas, sino que debe ser en espíritu y en la verdad de la Biblia. (“su palabra es verdad” Juan 17:17) Una de las razones principales por las cuales Dios juzgo al pueblo de Israel y los envío en cautiverio por 70 años fue la idolatría y cuando fueron liberados del cautiverio aún muchas cosas no habían sido resueltas, pero nunca más se volvieron a los ídolos. La idolatría incluso puede estar en nuestros corazones y puede ser que no sea ídolo visible, como se dice que es la codicia (Colosenses 3:5). Podemos llegar a querer mucho alguna cosa tanto que nos inclinemos a eso, y no a la voluntad de Dios. *(La Estatua de la Libertad, las muñecas de las niñas o los soldaditos de juguete no son ídolos ya que no son objetos de adoración.)
La Biblia habla constantemente en contra de la idolatría. Cualquier cosa que es un objeto de adoración, * oración, o al cual se le tenga fe, en lugar que a Dios, es un ídolo. “No te harás imagen, ni ninguna semejanza de lo que esté arriba en el cielo, ni abajo en la tierra, ni en las aguas debajo de la tierra. No te inclinarás a ellas, ni las honrarás; porque yo soy Jehová tu Dios, fuerte, celoso, que visito la maldad de los padres sobre los hijos hasta la tercera y cuarta generación de los que me aborrecen…” (Es el segundo mandamiento, Éxodo 20:4-5) Algunas iglesias tienen estatuas (ídolos) en cada esquina pero si las personas se inclinan, queman incienso, oran a ellos eso es idolatría. Dios es “celoso” cuando tenemos algún sustituto que toma su lugar. “¿Y qué acuerdo hay entre el templo de Dios y los ídolos? Porque vosotros sois el templo del Dios viviente…” (2 Corintios 6:16) “Siendo, pues, linaje de Dios, no debemos pensar que la Divinidad sea semejante a oro, o plata, o piedra, escultura de arte y de imaginación de hombres.” (Hechos 17:29)
La Biblia dice: “Dios es Espíritu; y los que le adoran, en espíritu y en verdad es necesario que adoren.” (Juan 4:24) Dios es el que decide como debe ser llevada ante el nuestra adoración y él dice que necesitamos (“debemos adorarle”) solamente de dos manera, “en espíritu” (no con cosas) y en “verdad” (la Biblia). Otras cosas como un piano o incluso el edificio de la iglesia son lindas, pero no es lo que requiere Dios, la iglesia primitiva no tenía ninguna de estas cosas. Pero hoy es posible “apropiarse” de una religió si ésta tiene ídolos u otras “cosas” de las cuales la Biblia habla en contra o no las menciona. Nuestra adoración a Dios no debe estar ligada a las cosas, sino que debe ser en espíritu y en la verdad de la Biblia. (“su palabra es verdad” Juan 17:17) Una de las razones principales por las cuales Dios juzgo al pueblo de Israel y los envío en cautiverio por 70 años fue la idolatría y cuando fueron liberados del cautiverio aún muchas cosas no habían sido resueltas, pero nunca más se volvieron a los ídolos. La idolatría incluso puede estar en nuestros corazones y puede ser que no sea ídolo visible, como se dice que es la codicia (Colosenses 3:5). Podemos llegar a querer mucho alguna cosa tanto que nos inclinemos a eso, y no a la voluntad de Dios. *(La Estatua de la Libertad, las muñecas de las niñas o los soldaditos de juguete no son ídolos ya que no son objetos de adoración.)