SANGRE
“Porque la vida de la carne en la sangre está, y yo os la he dado para hacer expiación sobre el altar por vuestras almas; y la misma sangre hará expiación de la persona.” (Levítico 17:11) Se cree que el presidente George Washington murió debido a que sus médicos no consideraron este versículo, “Porque la vida de la carne en la sangre está”. Ellos practicaban el “desangrar” a una persona para que la sangre “mala” saliera fuera de su sistema y Washington murió. La Biblia nos enseña que un sacrificio de sangre es necesario para el perdón de pecados “Y casi todo es purificado, según la ley, con sangre; y sin derramamiento de sangre no se hace remisión.” (Hebreos 9:22) La muerte de Jesús fue un sacrificio “un derramamiento de sangre” para el perdón de nuestros pecados. Si Cristo hubiera sido golpeados en la cabeza, estrangulado o envenenado, etc… Dios no hubiera aceptado Su sacrificio. Su muerte no hubiera sido suficiente porque “… la misma sangre es la que hará expiación de la persona” En el siglo XXI algunos se consideran “muy civilizados” para hablar de la sangre de Cristo. Pero la Biblia nos advierte ah no considerar la sangre de Cristo como “inmunda” (Hebreos 10:29). Hoy en día existen versiones de la Biblia y algunos himnarios que han quitado las referencias sobre la sangre de Cristo. Pero en el cielo los redimidos del Señor cantarán acerca de su “sangre”.
Una declaración tal como “creo que Cristo derramo su sangre, mientras él estaba muriendo por nuestros pecados”, puede parecer como si la persona estuviera de acuerdo con que la sangre de Cristo es necesaria, pero ese no es el significado de tan “difícil” declaración. La persona que hace una declaración así solo está diciendo “mientras él estaba muriendo por nuestros pecados”, él acababa de pasar a derramar su sangre al mismo tiempo que moría. La cena del Señor tiene dos elementos, el pan que representa el cuerpo de Cristo, y la copa, “Y tomando la copa, y habiendo dado gracias, les dio, diciendo: Bebed de ella todos; porque esto es mi sangre del nuevo pacto, que por muchos es derramada para remisión de los pecados.” (Mateo 26:27-28) Es la fe en la sangre de Cristo la cual puede perdonar los pecados, no la copa sólo representa la sangre de Cristo. Pero ambos elementos, el pan sin levadura y el fruto de la vid, son los que se sirven en la Santa Cena, Cristo nos encomendó específicamente que la copa representa “…mi sangre del nuevo pacto, que por muchos es derramada para remisión de los pecados.” Si alguno cree que solo la sangre de Cristo es necesaria para el perdón de pecados, entonces ¡solo deberá participar del pan sin levadura durante la Cena del Señor y no tomar la copa!
“Al que nos amó, y nos lavó de nuestros pecados con su sangre,…” (Apocalipsis 1:5) La Biblia dice que somos redimidos por “…la preciosa sangre de Cristo…” (I Pedro 1: 18-19) “en quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados según las riquezas de su gracia,” (Efesios 1:7). “en quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados.” (Colosenses 1:14, y otros versículos de este tipo).
“Porque la vida de la carne en la sangre está, y yo os la he dado para hacer expiación sobre el altar por vuestras almas; y la misma sangre hará expiación de la persona.” (Levítico 17:11) Se cree que el presidente George Washington murió debido a que sus médicos no consideraron este versículo, “Porque la vida de la carne en la sangre está”. Ellos practicaban el “desangrar” a una persona para que la sangre “mala” saliera fuera de su sistema y Washington murió. La Biblia nos enseña que un sacrificio de sangre es necesario para el perdón de pecados “Y casi todo es purificado, según la ley, con sangre; y sin derramamiento de sangre no se hace remisión.” (Hebreos 9:22) La muerte de Jesús fue un sacrificio “un derramamiento de sangre” para el perdón de nuestros pecados. Si Cristo hubiera sido golpeados en la cabeza, estrangulado o envenenado, etc… Dios no hubiera aceptado Su sacrificio. Su muerte no hubiera sido suficiente porque “… la misma sangre es la que hará expiación de la persona” En el siglo XXI algunos se consideran “muy civilizados” para hablar de la sangre de Cristo. Pero la Biblia nos advierte ah no considerar la sangre de Cristo como “inmunda” (Hebreos 10:29). Hoy en día existen versiones de la Biblia y algunos himnarios que han quitado las referencias sobre la sangre de Cristo. Pero en el cielo los redimidos del Señor cantarán acerca de su “sangre”.
Una declaración tal como “creo que Cristo derramo su sangre, mientras él estaba muriendo por nuestros pecados”, puede parecer como si la persona estuviera de acuerdo con que la sangre de Cristo es necesaria, pero ese no es el significado de tan “difícil” declaración. La persona que hace una declaración así solo está diciendo “mientras él estaba muriendo por nuestros pecados”, él acababa de pasar a derramar su sangre al mismo tiempo que moría. La cena del Señor tiene dos elementos, el pan que representa el cuerpo de Cristo, y la copa, “Y tomando la copa, y habiendo dado gracias, les dio, diciendo: Bebed de ella todos; porque esto es mi sangre del nuevo pacto, que por muchos es derramada para remisión de los pecados.” (Mateo 26:27-28) Es la fe en la sangre de Cristo la cual puede perdonar los pecados, no la copa sólo representa la sangre de Cristo. Pero ambos elementos, el pan sin levadura y el fruto de la vid, son los que se sirven en la Santa Cena, Cristo nos encomendó específicamente que la copa representa “…mi sangre del nuevo pacto, que por muchos es derramada para remisión de los pecados.” Si alguno cree que solo la sangre de Cristo es necesaria para el perdón de pecados, entonces ¡solo deberá participar del pan sin levadura durante la Cena del Señor y no tomar la copa!
“Al que nos amó, y nos lavó de nuestros pecados con su sangre,…” (Apocalipsis 1:5) La Biblia dice que somos redimidos por “…la preciosa sangre de Cristo…” (I Pedro 1: 18-19) “en quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados según las riquezas de su gracia,” (Efesios 1:7). “en quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados.” (Colosenses 1:14, y otros versículos de este tipo).